lunes, 8 de julio de 2013

La manzana

Un deforme que miro hacia dentro
Un asimétrico desdén que da vértigo 
Mis lentes se empañan, mis vasos se dilatan
No puedo, si no, salivar...
Cansada de depender de la vista
Cansada de los ciegos y sus falacias descomunales
"Ya veo lo que tratas de decir"
No te hundas en tus palabras de simpatía 
aléjate pues de la nefasta enfermedad
LA REAL
dejar la energía del latido volcarse
hacia afuera, hacia un tiempo pintado
hacia devenires que ni el metafísico puede inventar
los 4 caminos dicen ser dictados
Yo hablo de un quinto que no sale de la boca
no sale de la primer neurona
no sale del flachazo de la conciencia
no sale para hacerse materia 
solo ES cuando es acariciada por un minuto
no se hereda y menos se contagia...
Una ola convulsiva me hace reproducir la cinta...
Callando cada una de las voces
Prendo lo que busco, alumbro el supuesto camino
Salto por la ventana y me convierto en animal nocturno
La manzana se hizo en sí misma putrefacta
Cómela!...
Recuerda lo que era y a que se supone que sabía.

Cámara de sentidos agudos

De haber sabido que vendrías ésta noche 
me hubiese vestido de estrellas fugaces...
de agua y de madera seca antes de arder.
Me fascina abrirme el cráneo y dejar de temerle a los orificios
a la parte de realidad a la cuál le cierro la puerta cada verano.
Muero por caer en ti como antes
ahogarme como aquel verano, aquel invierno lleno de lluvia y verde brillante...
Mi hiena, mi corcel mi amazona.
No te esperaba tan hermosa con los miembros bien posicionados
hueles a libro nuevo
pareces viento de viejo cambio
ese que añoro y me libera de vez en cuando
Mi loca!, Toda tú mi loca!
Gracias por entrar por la ventana y no por la puerta que despierta 
cada mes que pasa.